En los últimos años de competición liguera, ha habido un equipo que ha ido creciendo de manera sorprendente, desde el momento de su ascenso a la categoría reina hasta ganarse un sitio en los octavos de final de la Europa League: el Getafe de José Bordalás. Los azulones han experimentado un cambio radical en tan solo cinco años, donde han pasado de ser un equipo de segunda división a ser uno de los conjuntos más temidos a nivel internacional por su singular estilo de juego.
El 15 de mayo de 2016, el Getafe caía derrotado frente al Betis en el Benito Villamarín en la última jornada de la temporada. Con ese resultado, consumó su descenso a la categoría de plata tras un año complicado para el conjunto azulón, con cambio de entrenador y graves dificultades económicas.
A pesar de que Juan Eduardo Esnáider no consiguió la salvación, el club confió en el técnico argentino y apostó por él para conseguir el ascenso la temporada siguiente. Sin embargo, Esnáider no sería entrenador del Getafe por mucho tiempo. Tras ir en penúltima posición con 6 puntos en 7 jornadas disputadas, fue destituido.

Betis 2 - 1 Getafe temporada 2015/16
El sustituto sería José Bordalás, el mismo que la temporada anterior había ascendido al Alavés a primera división. El técnico cambió profundamente a su equipo y rápidamente fue escalando posiciones. La regularidad de los azulones les permitió acabar la temporada como terceros clasificados. Tras vencer a Huesca y Tenerife en los play-off, el Getafe volvía a ser equipo de primera división de la mano de Bordalás, que ascendía por segunda temporada consecutiva a la categoría reina.

José Bordalás como entrenador del Getafe Club de Fútbol
El objetivo del club azulón consistía en la salvación. Aunque habían completado un magnífico curso en segunda división alcanzando el tercer puesto, el entrenador no llevaba ni un año entero en el banquillo y había dudas sobre si podría seguir dando tal rendimiento en la máxima categoría. Sin embargo, Bordalás disipó todas las dudas en muy poco tiempo.
En la temporada 2017-18, el Getafe terminó en octava posición, a solo 3 puntos de la séptima plaza, que otorgaba un billete para Europa League. Una de las claves de su éxito fue su fortaleza defensiva. Fue el tercer conjunto que menos goles encajó (33), únicamente por detrás de Barcelona (29) y Atlético de Madrid (22). El equipo seguía creciendo y parecía no tener techo. Estaba inmerso en una tendencia muy positiva que corroboró la temporada siguiente.
En el curso 2018-19, se hizo con la quinta posición asegurándose una plaza en Europa League. Con 59 puntos, se había quedado a 2 puntos de puestos de Champions. De nuevo, su excelente rendimiento no se puede entender sin su fortín en defensa. Solamente el Atlético de Madrid recibió menos goles que el Getafe, que encajó 35 tantos. Como se ha podido ver durante la temporada actual, el crecimiento de este equipo parece que no vaya a detenerse nunca.
A pesar de que tras el parón por el coronavirus no está cosechando sus mejores resultados, el Geta está en posiciones europeas y lucha por entrar en Champions. Además, se ganó estar en los octavos de final de Europa League después de derrotar a uno de los grandes de Europa, el Ajax, en los dieciseisavos. Este podría ser el rendimiento de un club con grandes fondos financieros, pero no es así. Cabe recordar que el conjunto del sur de Madrid es el noveno equipo que cuenta con menos presupuesto salarial de la Liga Santander.

Ajax 2 - 1 Getafe temporada 2019/20
Gran parte de los éxitos conseguidos por el Getafe pasan por su entrenador. José Bordalás no solo cogió a un equipo que se encontraba hundido en segunda división y lo ascendió, sino que lo ha hecho llegar hasta los puestos más altos de primera hasta el punto de llegar a Europa.
Para entender mejor sus resultados, es necesario conocer su estilo de juego. La formación preferida por el técnico alicantino es el 4-4-2, con las líneas muy juntas y con la zaga excesivamente adelantada. Gracias a esta colocación, puede ejercer una presión altísima en campo rival. Aunque su estilo de juego ha sido duramente criticado, existe una cuestión innegable: hay muy pocos equipos que sepan presionar de una manera tan efectiva como los azulones. La coordinación entre sus jugadores y su agresividad -es el equipo que más faltas comete por partido: 18,9, y el más amonestado: 3,5 tarjetas por partido- hacen cometer fallos a los contrarios. Y es que como diría Johan Cruyff, el fútbol es un “juego de errores” y el Getafe comete muy pocos.
El objetivo primordial del Getafe es evitar jugar en campo propio. De este modo es más fácil robar el esférico para armar un ataque rápido y contundente. Otro de sus puntos fuertes es su efectividad en balón parado. Es uno de los equipos que más goles de este tipo materializa (9 en lo que llevamos de temporada). De esta manera, José Bordalás es un amante del juego directo y vertical. Poco le importa la posesión o el número de pases: jugar en campo rival y recuperar balones en esa parte del terreno de juego es una de las mayores preocupaciones del entrenador.
El juego del Getafe será recordado por su efectividad y rendimiento, pero también por los múltiples detractores que se han ido presentando a lo largo de los años. El fútbol que propone Bordalás ha sido tildado por muchos de un juego muy trabado, con un sinfín de interrupciones y por supuesto, de mucha agresividad.
Uno de los entrenadores que ha hablado sobre el fútbol de los azulones ha sido Marcelino Toral, cuando se encontraba en el banquillo valencianista. La polémica envolvió los cuartos de final de Copa que enfrentaba a Getafe y Valencia. En el partido de ida (donde ambos se negaron el saludo inicial), Marcelino acusó a Bordalás de que su equipo jugaba “al borde del reglamento”, criticando así la dureza de su juego. Más tarde, los azulones ganarían por la mínima al conjunto ché y Bordalás le contestaría en la rueda de prensa recordando un rifirrafe que tuvo años atrás con Jurgen Klopp.

Tangana producida en el encuentro Valencia 3 - 1 Getafe
cuartos de final de la Copa del Rey
Otro enfrentamiento que ha protagonizado el alicantino fue de la mano de Quique Setién. El conflicto se originó en 2013, cuando Setién entrenaba al Lugo y Bordalás al Alcorcón. Tras el partido, que ganó el conjunto madrileño, el actual entrenador del Barcelona defendió que su rival “no juega a nada y no te deja jugar”. Además, añadió visiblemente enfadado: “Espero que no asciendan, da pena jugar contra ellos”.
Porque en el fútbol no siempre gana quien más dinero tiene, ahora cabe preguntarse, ¿dónde se encuentra el techo del conjunto madrileño? ¿Bordalás será capaz de alcanzar un puesto de Champions?
Habrá que esperar para saber si el Getafe mantiene el espectacular rendimiento mostrado hasta ahora. Por otro lado, tendremos que observar si otros entrenadores siguen criticando su estilo de juego. Si tantos lo hacen, querrá decir que alguna cosa estarán haciendo bien Bordalás y los suyos.